FILOSOFIA CAPITALISTA

El ser humano como todo ser que vive en la naturaleza social o animal es un ser con necesidades primarias y secundarias.

Desde que el hombre es hombre continuamente ha tratado de satisfacer sus necesidades, ¿pero que es una necesidad? ?, Es una ruptura del equilibrio físico emocional, por esta causa se crea una insatisfacción que demanda de alguna acción para recomponer el equilibrio y hallar satisfacción.

Con esto juega el capitalismo para lograr la dominación, y no tan solo por medio de la economía, aunque este es quizás su punto clave.

Las nuevas ciencias como la psicología, la sociología, la antropología y la lingüística con sus estudios del individuo y su comportamiento dentro del cuerpo social han venido para ahondar en su conciencia y su mente revelando y develando los porqué de su actuación y comportamientos determinados en una situación determinada, en un país determinado y en una cultura determinada.

Hoy por hoy, ya no es necesario como en pasadas épocas tanto el aparato militar (salvo ececpiones especiales) para encauzar pensamientos y sociedades, si no más bien con un estudio social profundo, a efectos de poder manipularlos psicológicamente. ¿Cómo se crea esto. ?,Con los conceptos de necesidad. Si existe una necesidad, esta debe ser estimulada para producir finalmente una satisfacción, un efecto.

El sistema capitalista genera esto, pero la satisfacción nunca llega, o en todo caso es momentánea, volviendo a producirse la necesidad. La trampa está lograda.

En esta vorágine del mundo capitalista y materialista el hombre está inmerso. El sistema crea necesidades continuamente, necesidades reales y/o ficticias, mantienen al hombre distraído de sus reales carencias

En esto el mercado crea bienes, productos y servicios. Los productos actúan como estímulos que movilizan al sujeto para satisfacer sus necesidades físicas, psicológicas o emocionales.

Hay dos motivos para una necesidad; motivo emocional y motivo racional. El mercado y el capitalismo también juegan con esto para influir en la sociedad.

Dentro de esta sociedad el hombre deja de ser hombre para transformarse en parte del engranaje de la gran máquina social. Hombre y herramienta terminan siendo una misma cosa, pierden individualidad para ser colectividad, aunque irónicamente la sociedad sea individualista.

Realiza su trabajo rutinariamente, mecánicamente, no hay lugar para los sueños, la creatividad o el esparcimiento mental y físico, y si lo hay, es mentiroso y artificial, como muchos aspectos de la sociedad.

El hombre se aliena dentro de su trabajo y su comunidad; transforma su conciencia hasta hacerla contradictoria con lo que debía esperarse de su condición.

La realidad es una pared contra la que chocamos todos los días. El materialismo y capitalismo están asentados sobre las necesidades y los deseos, el aquí y el ahora.

Pero el mercado no satisface todas las necesidades, porque este sistema no está basado en la igualdad, sino en la desigualdad. Estas necesidades insatisfechas son las que crean los conflictos sociales de nuestro mundo.

Para evitar esto hay varios caminos, conceder y ceder una parte minúscula de lo que se reclama, coerción o represión.

Esto habla a las claras del control que se ejerce sobre individuos y clases sociales. El control y el orden deben ser primordiales para lograr el dominio y la manipulación. La teoría del miedo social entra en escena.

Por suerte nada es estático, todo cambia, el hombre y su sociedad. Pretender y exponer el capitalismo y la democracia como los únicos modelos a seguir son como pretender que la santidad es la última y única cumbre del espíritu.